Volver al sitio

Yamile: Séptimo Capítulo

Yamile Acosta

Aquí de nuevo te escribe Yamile Acosta para contarte cada vez, un poco más de esta gran aventura que es la vida. El día de hoy quiero platicarte sobre mi primera Navidad lejos de casa. Fue algo muy diferente a lo que yo esperaba, no fue como al inicio lo imaginaba pero he de admitir que fue mejor de lo que esperaba. Mi primera Navidad lejos de casa la pasé con diferentes amigos, primero mis amigos franceses entre ellos al que ustedes ya conocen Yohann, también amigos mexicanos obviamente, Fernando mi mejor amigo, Taide y Ricardo.

broken image

Es lógico que al llegar a un lugar a pesar de ser todos de la misma nacionalidad nuestros gustos y personalidades nos acercan a quienes son más como nosotros y por esa razón no todos los mexicanos estuvimos juntos el día de Navidad, hubo algunos grupos más grandes que otros pero todos la pasamos genial. Vinieron amigos de otros países como de Corea, Uzbekistán, entre algunos otros. Nuestro plan fue rentar un Airbnb ya que los dormitorios de la universidad son cuartos muy pequeños y en el Airbnb tendríamos una cocina con todo lo que necesitaríamos, así que así lo hicimos. Al momento de comenzar a buscar la casa que rentaríamos, no fue nada fácil, éramos alrededor de 17 personas que nos quedaríamos a dormir en un mismo hogar y no sabíamos si encontraríamos algo así de grande, después de días buscando encontramos el lugar que creímos sería el indicado, estaba cerca de la montaña.

broken image

Teníamos que quedarnos a dormir dos noches, la primera nos quedamos algunas personas, no fuimos todos y la segunda llegaron todos los demás. La primera noche fue muy divertida, conocimos el lugar, fuimos a cenar cerca y pasamos momentos agradables juntos. La segunda noche era el día esperado, fuimos a comprar todo lo que necesitábamos al súper y de ahí fuimos a cocinar, todos creyeron que porque yo era la que se encargó de juntar el dinero, escoger una casa que se adaptará a nuestras necesidades y tenía antojo de ciertos platillos, yo sería la encarga de mandar a cada uno para ayudar con algo.

broken image

No les miento, sí les digo que tuve el papel que me dieron pero hubo momentos en los que no tenía la menor idea de lo que estábamos haciendo, jajaja. Primero necesitábamos de un horno para cocinar los platillos principales y segundo el horno que había en la casa ya no servía entonces eso nos arruinó todas las ideas, a cómo mi cerebro me dio a entender les pedí que cortaran en pedazos verduras y que acomodarán esto aquí.

broken image

Y así estuvimos durante 4 horas cocinando y cuando finalmente terminamos, no les miento si les digo que la comida se veía muy rica pero el sabor era lo que todos dudábamos. Nos arreglamos y nos preparamos para la cena, servimos los platos, agradecimos a Dios por esta Navidad juntos (a pesar de que no todos éramos de la misma religión) y comimos, cuando recién probamos la comida no es mentira si les digo que sabía deliciosa, yo sigo teniendo la teoría de que fue obra de Dios porque no es broma que no tenía la menor idea de lo que estaba haciendo en el momento exacto. Cantamos canciones juntos, bailamos, nos reímos, platicamos mucho, hicimos de todo y a pesar de que extrañé mucho a mi familia en Navidad y a pesar de que me dolió romper con mi tradición familiar, esta gente maravillosa con la que pasé mi Navidad, la hicieron un día muy especial, ellos son la familia que escogí en el otro lado del mundo y qué afortunada soy de tenerlos. Los quiero invitar a que valoren las pequeñas cosas como pasar Navidad con su familia y la cena deliciosa que tienen, aunque a veces parece normal porque es algo que cada año hacemos y se vuelve costumbre, una vez que no lo tienes te das cuenta de cuán valioso es y quisieras volver a vivirlo.

broken image

Esta fue mi Navidad, una diferente pero muy divertida, llena de mucho amor y felicidad sobre todo. Ésta es la aventura de mi vida y tengo mucho que contarles, si te interesa mi vida no olvides leerme cada semana, te traeré una nueva aventura con mucho crecimiento, aprendizaje y más. Te doy la oportunidad de leerme y tú, ¿me das la oportunidad de contarte? Nos vemos la próxima semana con más emoción que está pero menos que la próxima. Te deseo una linda semana y muchas buenas vibras. Adiós!